La escuadra purépecha se encuentra al borde de una crisis, pero las alarmas apenas se encuentran en ámbar, la pregunta es si ahora los directivos harán algo cuando todavía hay tiempo. 

En último de los especiales revisamos la carencia de resultados y la necesidad de refuerzos, para este último especial daremos cuenta del abandono en el que ha caído la escuadra purépecha, en parte por la directiva y en parte por otros.  

Comenzamos por lo evidente, desde la compra del Atlas la escuadra purépecha ha caído en desgracia, luego de pasar a ser el segundo en la relación de dueños con Tv Azteca, que, si bien afirma que no invierte directamente en los clubs, sí fue el responsable de desarmar a Morelia para salvar al cuadro tapatío.

Desde noviembre del 2013, fecha en que la televisora se hizo con el club rojinegro, Monarcas ha vivido las peores de sus épocas, después de ser invitado constante en Liguilla y jugar una final, de inmediato pasó a su peor racha sin clasificar en toda la era de torneos cortos, cuatro consecutivos. 

En los once torneos previos promediaron 26 puntos por torneo, mientras que en los once torneos posteriores a la hermandad las cifras llegan apenas a 20, sin contar con lo que se haga este torneo, mientras que el promedio de triunfos pasó de 7.5 por torneo a 5.3. 

De las ocho veces que se clasificó a Liguilla previamente, se llegó a la final en una ocasión, en tres a semifinales y se perdió en cuarto; ahora se han calificado apenas a cuatro liguillas de 11, en una se logró la calificación a ‘semis’, mientras que en tres se perdió en cuartos. 

Por si eso no fuera poco, los refuerzos para el plantel han ido a la baja, hasta llegar a esta temporada donde se trajo a Alberto Acosta y Cándido Ramírez, este último lesionado y proveniente del Ascenso. 

Luego de la compra de Atlas las cifras de refuerzos bajaron, del 2009 al 2010 se trajeron 12 refuerzos; del 10 al 11, 15 más dos canteranos; del 11 al 12, 9 más tres de cantera; del 12 al 13, 18 más uno de cantera; la última previa al Atlas, del 13 al 14, 19 más uno de cantera. 

En la época post hermandad, se comenzó con 17 más dos canteranos en la 14-15; en la 15-16 fueron 14 refuerzos; en la 16-17, 15 más un canterano; en la 17-18, fueron dos más cuatro canteranos; mientras que en este 18-19, se cerraron siete contrataciones más cuatro cantearnos, según cifras de transfermarkt.  

Con esto se muestra que la plantilla de Monarcas se ha encontrado en el abandono de su directiva desde hace ya un tiempo, quizá la compra del Atlas sólo sea coincidencia, como dicen ellos, quizá tenga que ver, pero lo que es cierto es que Morelia pasó de ser un cuadro de lujo y competitivo a una de las plantillas más pobres de la Liga Mx. 

Pero eso no es todo, los patrocinadores han sido cada vez más escasos en la playera purépecha, el propio Álavaro Dávila reconoció que las empresas locales no quieren invertir en el equipo, quizá habría que preguntarse a quién le gustaría ver a su marca peleando los últimos lugares de la tabla. 

Monarcas se destacó por ser uno de los tres equipos con mayor proyección en Estados Unidos, sólo por debajo de América y Chivas, no obstante, poco a poco se apaga la luz del apoyo, pues si bien tiene una afición fiel que llena el Morelos cada quince días, cada vez son más los que desisten de hacer corajes con juegos sordos, entrenadores de escaso cartel y pobres refuerzos. 

Estas críticas las ha tenido la afición contra los michoacanos y sus directivos, que desde la era de Pablo Boy ha comenzado a manifestarse en contra, con protestas en mantas y en dibujos, como la iniciada el partido pasado contra el presidente Álvaro Dávila. 

Los aficionados han pedido no sólo la salida de Dávila, pues afirman que un título en casi dos décadas es señal de la ineptitud del otrora artista; así como han coreada la salida de técnicos, ahora se esfuerzan en demostrar su descontento con la empresa de futbol. 

Mientras tanto, la afición purépecha poco a poco comienza a dejar las gradas, cumpliendo su amenaza de no consumir a Monarcas hasta que les ofrezcan un producto de calidad. Al momento sólo han superado los 20 mil espectadores en el debut en casa y en el juego contra América. 

El Morelia vs Lobos, con 15,021, se encontró entre los partidos con asistencia más baja del torneo, siendo el menos visitado de la Jornada 11, pero de los peores se encuentra como el que mejor asistencia tuvo. 

Así es como poco a poco Monarcas se queda sin apoyo, con una directiva concentrada en otras cosas, patrocinadores nada interesados en ellos y una afición que de apoco se comienza a cansar de gritar siempre con el llanto en la boca y el rosario en la mano. 

Luego de tres especiales hemos mostrado cómo Morelia se enfrenta no sólo a una crisis porcentual, como lo mostramos previamente, sino a dificultades de jugadores e incluso emocionales, Monarcas tiene síntomas claros de una anemia de identidad y corazón, habrá que ver si se hace algo por rescatarlo…