Elías Hernández anotó dos tantos a su ex equipo y sentenció un partido que parecía pintar mal para los cruzazulinos en primera instancia.
Cruz Azul terminó por golear a León, en un encuentro donde los celestes quedaron con uno menos durante una gran parte del primer tiempo; mantiene la recha imbatible en el torneo o pasó por encima a un conjunto que sigue presentando problemas para aprovechar las ventajas situacionales y que se ve lejos de su mejor forma.
Luego de un par de anuncios por parte de los visitantes, la polémica se hizo presente pasado el cuarto de hora, con la expulsión de Gerardo Flores tras una entrada sobre Pedro Aquino con los tachones por delante. A consecuencia León vivió los mejores momentos del encuentro con un cuadro Celeste que tuvo que soportar los embates adversarios por gran parte del primer lapso.
Pese a todo lo anterior, la recta final dio un giro completo a la situación que se gestaba en el ‘Coloso de Santa Ursula’, con la anotación de Elías Hernández al minuto 31, tras recibir un pase filtrado de Roberto Alvarado en el área y rematar con la cabeza tras rebotar la pelota en primera instancia contra el guardameta Rodolfo Cota, que poco pudo hacer ante el contra remate del que se convirtiera en verdugo de su ex equipo.
La inercia negativa no paró ahí para los Esmeraldas, que perdieron la ventaja numérica con la expulsión de Alexander Mejía apenas 4 minutos después de irse abajo en el marcador y en el 40’, el propio Hernández volvería a hacer valer la ley del ex de nueva cuenta, luego de recibir con espacio a dentro del área y definir al poste cruzado de Cota, agrandando la crisis que vivían los de Guanajuato en el terreno de juego.
Con la paridad repartida en la cantidad de elementos sobre el terreno de juego y dos anotaciones abajo, la segunda mitad se tornó complicada para la escuadra leones, cuyos intentos por frenar el arranque fructífero de ‘La Máquina’, finalizaron en una goleada concretada a 120 segundos de concluir el tiempo reglamentario, con un cabezazo de Milton Caraglio, que encontró techado a Cota y terminó con las aspiraciones de los pupilos de Gustavo Díaz.