Chivas: incertidumbre y desesperación
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Tras una serie de polémicas que se acumulan en años y se cuentan por montones, hoy la realidad de Chivas vuelve a ver el panorama oscuro, que ya comienza a hacerse una constante en la última década.
Cada vez más cercano el último tramo de competencia en la fase regular de la Liga BBVA en su edición de Apertura 2019, el camino que ha recorrido Chivas hasta el presente momento, ha sido turbulento, preocupante y con poco sentido de dirección respecto al futuro, tanto a mediano, como a largo plazo, en cuanto a los objetivos que se pretenden en un equipo tradición, con una capacidad de convocatoria amplia.
Desde la partida de Matías Almeyda, junto con la base del equipo que consiguió los campeonatos de Liga, Copa y la Liga de Campeones de la CONCACAF, la gestión deportiva en el Rebaño Sagrado se ha mantenido en un nivel bajo, partiendo por la situación económica, en conjunto con el mal manejo de la cantera, hasta una cuestionable tarea de traer refuerzos, generando un armado de plantel insuficiente para afrontar la competencia en el balompié mexicano.
Con 12 unidades sumadas en 12 fechas, tras 3 victorias, 3 empates y 6 derrotas, que los han posicionado en la plaza 17 del certamen, además del penúltimo peldaño en la contienda por el no descenso, el resto del semestre, bajo la tutela de Luis Fernando Tena, presenta argumentos poco alentadores para pensar en un cierre importante para el cuadro ‘Rojiblanco’, que se debate en cambios importantes a futuro.
Otro de los grandes temas, por donde pasan la mayor parte de los debates respecto al Deportivo Guadalajara, radica en el banquillo, vacante que, con sorpresiva llegada de José Saturnino Cardozo, la polémica contratación de Tomás Boy -quien fue cortado a 48 horas del Clásico Nacional, dejando pasar una Fecha FIFA previa-, y la poco aplaudida llegada de Tena, ha generado dudas respecto a la existencia de un proyecto por parte del recién llegado Amaury Vergara.
En cuanto a los futbolistas, con sus fallos respectivos, Alexis Vega, Antonio Briseño y Jesús Molina, han sido los más constantes al paso de las jornadas, en conjunto de un Alan Pulido que, desde sus primeras campañas, ha regresado al rol protagonista con méritos más individuales. Respecto a éste último, las 7 dianas cosechadas le han bastado para estar entre los 5 mejores goleadores de la campaña, aunque no para hacer de la ofensiva tapatía una de las mejores, con 16.
Por parte de la defensiva, tanto Antonio Rodríguez, como Raúl Gudiño, han ido rotando el llamado en la portería, sin ganarse la confianza para el puesto, mientras que la defensa comandada por el ‘Pollo’, también ha sido víctima de fallos, entre la lesión Hiram Mier, la ineficacia de Oswaldo Alanís, la aparición refrescante, pero imperfecta de Gilberto Sepúlveda, sumada a la falta de una pareja de laterales que aporten seguridad en el terreno de juego, han llevado a un total de 21 anotaciones encajadas: una de las más endebles de la Liga.
Por más que la fanaticada chivista deseara una milagrosa remontada, que les evite la pesadumbre del cociente y regrese la esperanza de calificar entre los primeros 8 cuadros de la competencia, la realidad nos dicta que todo es incierto, así como cada decisión de peso tomada desde el escritorio, todo puede suceder durante los meses que quedan por jugarse, si es bueno o malo, solo el tiempo dirá.
